Especies de flora en peligro de extinción en Ecuador
En el Ecuador hay cientos de especies en peligro de extinción pero yo les hablare de las que yo considero son las más importantes especies en peligro de extinción.
Helechos: Varios
tipos de helechos que habitan en los bosques de la costa y en la zona amazónica
están ahora en peligro debido al cambio climático. Hace 40 años, el ambiente
cálido y húmedo, estable permitía el desarrollo de estas especies de flora, en
la actualidad el cambio brusco de tiempo y las variaciones de la temperatura
han colocado a estas especies en peligro.
Corales: Los
variados tipos de corales simples que presenta el golfo de Guayaquil y las costas
ecuatorianas, se han visto afectados por la contaminación oceánica y en mayor
parte por la variación de las corrientes marinas que causan oleajes que
destruyen los arrecifes, hábitat de estas especies.
Bosques tropicales: Estos inmensos bosques son el hogar de una gran variedad de especies de musgos, helechos, briofitas y coníferas. Sin embargo en nuestro país el calentamiento global ha causado una fuerte variación climática, que produce inundaciones que destruyen inmensas hectáreas de cubierta floral importante. La tala indiscriminada y el factor antrópico empeoran la situación.
Bomareas: Son
un grupo de plantas con bellas flores que habitan en los bosques andinos. En
los últimos años los múltiples deslaves de terreno en las montañas, causados
por la erosión natural del suelo han hecho que se pierda el terreno donde se
dan estas bellas plantas, la variación de temperatura y la intervención del
hombre, también afectan a esta especie.
Bosques tropicales: Estos inmensos bosques son el hogar de una gran variedad de especies de musgos, helechos, briofitas y coníferas. Sin embargo en nuestro país el calentamiento global ha causado una fuerte variación climática, que produce inundaciones que destruyen inmensas hectáreas de cubierta floral importante. La tala indiscriminada y el factor antrópico empeoran la situación.
Heliconia:
Presentando alrededor de 250 especies, las heliconias son plantas endémicas de gran atractivo
pertenecientes a Sudamérica, del Pacífico Sur y de Indonesia. Su altitud puede
llegar hasta unos siete metros de altura, son la Heliconia obscura, Heliconia berryi y Heliconia brenneri, las especies que corren peligro de extinción por la
deforestación.
Especies de fauna en peligro de extinción
Tortugas marinas:Que habitan en las costas ecuatorianas, se ven afectadas por el cambio climático que produce catástrofes naturales como las mareas que destruyen el hábitat de este animal. Eso sumado a la intervención del hombre que contamina los mares y expande su territorio en el desarrollo turístico y urbano y a la vez destruye el territorio de esta especie.
Ballenas jorobadas: No es una especie propia de Ecuador, pero en la actualidad muchos ejemplares habitan nuestros mares debido a las condiciones favorables que estos ofrecen a las ballenas para que estas puedan sobrevivir. Sin embargo el calentamiento global ha producido un cambio en las rutas migratorias de las ballenas, debido a las variaciones de la temperatura del océano.
Anfibios: Especies de ranas y sapos como el jabato, sapo endémico que habita en Cotopaxi, y otras especies más propias de la Amazonía ecuatoriana. Se encuentran en peligro por ser vulnerables a los rayos UV. Del sol, debido a las fisiologías de su organismo, deben tener la piel húmeda por la respiración cutánea. Las altas temperaturas originan este gran problema que afecta a los anfibios ecuatorianos.
Pingüino de galápagos: Especie endémica de nuestro país, ha reducido más de la mitad de su población desde los años 70, la causa el “efecto invernadero” que se da debido a las variaciones climáticas. Esta causa “inestabilidad climática” y fuertes variaciones de la temperatura de forma simultánea y prolongada que alteran el comportamiento de esta especie, además de destruir su hábitat al alterar las condiciones climáticas del mismo.
Tapir amazónico: Conocido como vaca de monte, vive en los bosques amazónicos en las provincias de Pastaza y Zamora Chinchipe. La destrucción del bosque primario y secundario, zonas en las que habita, han colocado a la especie en peligro, pues las fuertes lluvias erosionan el suelo y destruyen la cubierta vegetal, que sostiene a los árboles, este proceso es empeorado por la tala indiscriminada de bosques.
Tortugas marinas:Que habitan en las costas ecuatorianas, se ven afectadas por el cambio climático que produce catástrofes naturales como las mareas que destruyen el hábitat de este animal. Eso sumado a la intervención del hombre que contamina los mares y expande su territorio en el desarrollo turístico y urbano y a la vez destruye el territorio de esta especie.
Ballenas jorobadas: No es una especie propia de Ecuador, pero en la actualidad muchos ejemplares habitan nuestros mares debido a las condiciones favorables que estos ofrecen a las ballenas para que estas puedan sobrevivir. Sin embargo el calentamiento global ha producido un cambio en las rutas migratorias de las ballenas, debido a las variaciones de la temperatura del océano.
Anfibios: Especies de ranas y sapos como el jabato, sapo endémico que habita en Cotopaxi, y otras especies más propias de la Amazonía ecuatoriana. Se encuentran en peligro por ser vulnerables a los rayos UV. Del sol, debido a las fisiologías de su organismo, deben tener la piel húmeda por la respiración cutánea. Las altas temperaturas originan este gran problema que afecta a los anfibios ecuatorianos.
Pingüino de galápagos: Especie endémica de nuestro país, ha reducido más de la mitad de su población desde los años 70, la causa el “efecto invernadero” que se da debido a las variaciones climáticas. Esta causa “inestabilidad climática” y fuertes variaciones de la temperatura de forma simultánea y prolongada que alteran el comportamiento de esta especie, además de destruir su hábitat al alterar las condiciones climáticas del mismo.
Tapir amazónico: Conocido como vaca de monte, vive en los bosques amazónicos en las provincias de Pastaza y Zamora Chinchipe. La destrucción del bosque primario y secundario, zonas en las que habita, han colocado a la especie en peligro, pues las fuertes lluvias erosionan el suelo y destruyen la cubierta vegetal, que sostiene a los árboles, este proceso es empeorado por la tala indiscriminada de bosques.